En estos días varios amigo@s, compañer@s y
universitari@s han comentado mi columna iusfilosofando sobre la derrota
inevitable del PAN y me han pedido comparta algunas razones por las cuales no
debemos votar por el PRI.
En atención a ello, comparto 5 razones por
las cuales el PRI no merece regresar a Los Pinos y que a continuación enumero.
1.
Corrupta cultura política. Los más de 70 años que
vivimos en un régimen político donde el principio central de la disputa por el
poder fue “plata o plomo”; “el que no transa no avanza”; “esta es la ley de Herodes:
o te chingas o te jodes”, esas ideas permearon varias generaciones que construyeron
cultura política que llego hasta los ciudadanos comunes y corrientes.
En este régimen, hasta el intendente que poseía
las llaves del baño tenía poder, chantajeaba, presionaba, controlaba, todo por
una llave que permitía el acceso a los baños. Ese régimen construyó la cultura
del soborno, de la mordida, de la mochada, practica que se extendió en todas
las esferas de la sociedad.
2. Fraude
electoral:
El régimen priísta no soportó el disenso, no toleró la competencia, abortó toda
posibilidad de transformación y transición democrática, el ejemplo claro de
ello fue la elección de aquel histórico 6 de julio de 1988.
La cultura del fraude electoral, también fue
practica que se extendió a lo largo y ancho del país, mantener el poder, o
arrebatarlo a toda costa, representaba espacio político, poder económico,
presencia mediática. El ratón loco, los mapaches, el carrusel, la rasurada de padrón,
las urnas embarazadas, fueron términos que se agregaron a nuestro lenguaje
político para describir las prácticas político-electorales de quien se negaba a
aceptar su derrota.
3.Represión
política: Para
la el régimen derrotado en las urnas hace más de dos décadas, no bastó
arrebatar el triunfo presidencial, era necesario callar, fulminar la
disidencia, controlar los daños, extinguir las voces de los líderes sociales y
políticos que se nuclearon entorno a una candidatura que representó el Frente
Democrático Nacional (FDN).
Así, sólo durante el sexenio de Caros salinas
de Gortari fueron asesinados más de 500
perredistas en todo el país. Pero la práctica no quedaba ahí, se infiltraban en
sus mítines o marchas y provocaban a los antimotines para la represión. El objetivo era mostrar a
un partido violento al que tenía que reprimirse, acallarse, demostrar que no
era posible una alternativa.
4. Crisis
económica. Para
los nacidos en la década de los 70´s no hubo alternativa más que vivir con
pobreza, ser la generación de la crisis, víctimas del modelo neoliberal. La inflación
en el sexenio de Luis Echeverría (1970-1976) fue de 76%; con López Portillo
(1976-1982) 582%; con Miguel de la Madrid (1982-1988) 1,421%; con Salinas de
Gortari (1988-1994) 38%; y con Ernesto Zedillo (1994-2000) 205%. (Cfr. PRI:
pesadilla de 71 años: Martín Moreno)
La devaluación del peso frente al dólar fue
de 136% con Echeverría; 495% con López Portillo; 3, 710% con De la Madrid!;
139% con Salinas de Gortari y de 226% con Ernesto Zedillo. Respecto de la deuda
externa los gobiernos priístas nos heredaron a nosotros y “a los hijos de
nuestros hijos” como decía Salinas, números que matan las aspiraciones de
desarrollo de varias generaciones. Con Luis Echeverría (1970-1976) 19 mil 600
millones de dólares; con López Portillo (1976-1982) 58 mil 874 millones de dólares; con Miguel de
la Madrid (1982-1988) 81 mil millones de dólares; con Salinas de Gortari
(1988-1994) 85 mil 435 millones de
dólares; y con Ernesto Zedillo (1994-2000) 84 mil 600 millones de dólares. (Cfr. PRI:
pesadilla de 71 años: Martín Moreno)
5. Desigualdad
social. Los
regímenes del PRI hicieron una transformación importante, México pasó de ser un
país pobre a uno miserable, en dos años del sexenio de Zedillo se agregaron 16
millones de pobres a los existentes. Aproximadamente, 22 mil 500 diarios. Cerca
de mil pobres cada hora, 16 por minuto.
¿Ya no recuerdan acaso que fue necesario
quitarle ceros al peso? ¿Ya olvidaron que se gestionó desde el Ejecutivo ante
la Cámara de Diputados la posibilidad de cambiarle de nombre a nuestro país, de
Estados Unidos Mexicanos a México sólo para satisfacer los requerimientos de
organismos económicos internacionales?
Esas son sólo cinco razones que aporto por
las cuales no es posible que México regrese al pasado corrupto, un pasado que
dañó, retrasó y condenó el futuro de generaciones. El régimen que hoy se quiere
imponer representa una regresión peligrosa a la transición democrática que el
país vive.
Es una obligación ética y cívica de cualquier
mexicano, no permitir que los 70 años que dañaron al país regresen por lo que
no se pudieron llevar. Ni presente inepto, ni pasado corrupto; futuro mejor, es
lo que merece este país, y eso sólo es posible con un cambio verdadero. Un cambio
que esta en nuestras manos este 1 de julio.
Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.
Magnífico texto Maestro; ya en esta recta final de campañas electorales hacen falta este tipo de ejercicios intelectuales que aporten elementos claros y contundentes de lo que representaría.
ResponderEliminarUn honor y placer leerle.
Hagamos que esta Columna de la vuelta por la Twittósfera.
Excelente para la desmemoria, un terrorífico, pequeño, listado de las atrocidades del viejo y actual régimen Priísta.
ResponderEliminarDe lectura muy necesaria.
Gracias, como siempre, por el excelente texto. Un fuerte abrazo y hasta pronto!!