@iusfilosofo
Los fines de año siempre nos permiten hacer un alto; generar
reflexiones en torno a los hechos, actos y omisiones que ocurrieron a lo largo
de los doce meses que vivimos con intensidad, pasión, desilusión o hastío,
dependiendo del lugar donde nos encontremos.
A punto de concluir 2015 bien vale la pena reflexionar en torno a
como contribuimos -con acciones u omisiones- en la construcción o destrucción
de nuestro entorno. En la mejora de la calidad de vida, nuestra y de quienes
nos rodean. En la construcción de una sociedad critica, participativa, y a
veces necesariamente mordaz.
También,
vale decirlo en la supervisión de la calidad de nuestro sistema educativo o en
su caso en la formación de “los ciudadanos” desde el aula. Analizar el mandato
del señor de Los Pinos, y su séquito de neoliberales. No sea que tengan que
agradecerle que las 141 estaciones de televisión analógica se suman al apagón
que tendrá lugar el próximo 31 de
diciembre y de esta forma podrán usar las televisiones que regalo con cargo al
erario público.
Tal Vez no callar que a pesar de que el PAN ya no está en el poder las olas de
violencia no acaban en el país y que de acuerdo con el Centro de Monitoreo de
Desplazamiento Interno, seis de cada 100 mexicanos han decidido dejar su estado
natal por razones de inseguridad y violencia, según estimaciones oficiales.
Que decir
de los terribles casos de la Guardería ABC, de los asesinados en Tlatlaya, de
los desaparecidos de Ayotzinapa, de los periodistas asesinados en el país y
especialmente en Veracruz. O que a 18 años de la masacre de Acteal no haya
culpables detenidos y por el contrario, sobrevivientes y familiares de víctimas
denuncien que el gobierno del señor Peña quiera comprarlos con una “solución
amistosa”.
Pero no
todo es malo –aja- como omitir que el benevolente gobernador de Querétaro –el panista
Francisco Domínguez- rifó dos casas entre reporteros, bajo el argumento de que
no gozan del derecho a la vivienda. Con esta acción se pone a mano con la
declaración del oriundo de Atlacomulco que ayer firmó que “2015 ha sido un año
en el que hemos avanzado y nos estamos preparando para el futuro”.
Quizá el
señor Peña no tenga el dato, de que el Estado de México –su estado natal-,
Guerrero, Veracruz, Chihuahua y Jalisco, sean los cinco estados que concentran
el 35 por ciento de los casos de homicidio en el país, de acuerdo con el informe
de víctimas de homicidio, secuestro y extorsión 2015 del Secretariado Ejecutivo
del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) y que por esa sencilla razón
no haya mucho que alegrarnos. Sumado desde luego a la falta de acceso al empleo
digno, derecho a la salud, a la recreación, a la vivienda digna, al medio
ambiente sano, entre otras muchas cosas.
Después de lo dicho, tal vez no sepamos si existe un futuro
mejor pero como dice Luther King, -desobediente civil por excelencia- "Si
supiera que el mundo se acaba mañana, yo, hoy todavía, plantaría un
árbol."
Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem y felices fiestas nos leemos el próximo año.