En mis entregas anteriores
he referido como los Peña Boys -el equipo cercano a Enrique Peña- se ha
aferrado a su cargo y se han mantenido en su secretaria como una parcela
particular de poder - QUE SE VAYAN ☛ http://t.co/rOcV49IBIT - que les
permite a ellos y a su séquito gozar de salario, estructura y reflectores para
la próxima contienda interna donde se definirán las candidaturas a Diputados
Federales y las cuales les permitirá colocar a su amigos y colaboradores en una
curul.
Lo cierto es que varios de
ellos debieron de haberse ido por su clara incompetencia para resolver los
problemas que enfrenta el país y que nos han colocado en los peores lugares del
desarrollo humano no solo de América Latina sino del mundo. Secretarios que van
desde el “aguanta Rosario” hasta el “Ya
me cansé”.
Pero parece que al señor de
Los Pinos le tiembla la mano para
tomar decisiones al respecto, y despedir a sus subordinados o tal vez pues no
ha logrado el consenso necesario para remover a sus funcionarios; lo que es
visible es el poder, la influencia y disputa entre Osorio Chong y Videgaray Caso
por la sucesión presidencial. Lo cierto es también que aunque han desaparecido
43 normalistas, no hemos escuchado a los dueños de ciertos Organismos Civiles
decir con lágrimas en los ojos "sino pueden renuncien".
Peña se niega a obedecer la
Constitución que en su artículo 89 que señala las facultades y obligaciones del
Ejecutivo, entre ellas las de la fracción II. Nombrar y remover libremente a los Secretarios de Estado, remover a los
embajadores, cónsules generales y empleados superiores de Hacienda, y nombrar y
remover libremente a los demás empleados de la Unión, cuyo nombramiento o
remoción no esté determinado de otro modo en la Constitución o en las leyes. Se
resiste tal vez porque quiere mantener la imagen de “hombre fuerte” al que ni
las manifestaciones le quitan el sueño, pero un hombre que se empecina en
fantasear una realidad incierta.
Mientras eso ocurre, el
país no aguanta más y parece que los mexicanos no están dispuestos a seguir
tolerando la ineficacia del inquilino de Palacio Nacional. Las "Cajas
chinas" ya no tiene el mismo efecto distractor para una sociedad que tiene
claro los temas relevantes para el país.
Ayotzinapa y "La Casa
Blanca" son dos temas relevantes de la agenda actual que parecen darle una
segunda oportunidad a los mexicanos para conocer la realidad del país, la
realidad que los estudiantes de la Ibero le gritaron a Peña en 2012 y que
provoco la primera movilización contra Peña. La realidad es otra y no pasa por
la televisión, esta realidad se va conociendo con canales paralelos de comunicación
y que han hecho que en las últimas grandes movilizaciones por el caso
Ayotzinapa, muchos ciudadanos hayan pedido la renuncia de Peña Nieto.
Sobre dicho tema, no hay
que perder la realidad, si bien el artículo 84 constitucional refiere que “En caso de falta absoluta del Presidente de
la República, en tanto el Congreso nombra al presidente interino o substituto,
lo que deberá ocurrir en un término no mayor a sesenta días, el Secretario de
Gobernación asumirá provisionalmente la titularidad del Poder Ejecutivo”. Lo
cierto es que con el escenario actual no le conviene al país tener a Osorio
Chong como presidente provisional, o ¿Acaso ya olvidaron que la escuela normal rural Luis Villarreal de
la comunidad El Mexe, fue cerrada cuando
Chong era gobernador de Hidalgo?
Este primer escenario –Osorio
Chong presidente- se actualizaría “Cuando
la falta absoluta del Presidente ocurriese en los dos primeros años del período
respectivo” (Artículo 84 constitucional tercer párrafo) es decir antes del
primero de diciembre, pero si ocurre después, opera otro escenario, veamos “Cuando la falta absoluta del Presidente
ocurriese en los cuatro últimos años del período respectivo, si el Congreso de
la Unión se encontrase en sesiones, designará al presidente substituto que
deberá concluir el período”. (Artículo 84 constitucional quinto párrafo). Es
este escenario, la lista de personajes para suceder a Peña se incrementa y los
nombre no son del mejor linaje. Considerar esta hipótesis abriría una lucha por
el poder de los poderes más oscuros, saldrían a la luz los siniestros
personajes que hoy solo se encuentran a la sobra del poder.
Siendo realistas e invito a
que lo seamos, no se actualizarán la hipótesis primera del 84 constitucional,
por más que Osorio Chong quisiera, ni tampoco la segunda aun cuando sea la aspiración
de Manlio y su pandilla, los poderes facticos son muy fuertes y aún falta una
sociedad informada, organizada y con capacidad de movilización. La única realidad
visible y alcanzable para los mexicanos es restarle poder al Establishment actual, es decir, quitarle
el Congreso a Peña y de mostrar que el poder ciudadano es bastante como darle
ordenes desde la Cámara de Diputados, que es la responsable de aprobar el
presupuesto y la ley de Ingreso.
Vivamos la realidad, quítale
el Congreso a Peña es mi propuesta.
Por hoy es todo, nos leemos
la próxima. Carpe diem.