Samuel Hernández
Apodaca
@iusfilosofo
Mientras el Comité de Naciones
Unidas para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales ha manifestado su
preocupación por la situación en que se encuentran dichos derechos en nuestro
país, la Auditoría
Superior de la
Federación (ASF) señala irregularidades en apoyos de
programas sociales que fueron entregados a personas de más de 100 años, a
fallecidos o bien repartos duplicados ante la incapacidad de crear un padrón
confiable y no manipulado de beneficiarios de programas de la Secretaria de
Desarrollo Social (Sedesol).
En Ginebra, Suiza, México está
siendo sometido a un análisis sobre el actual estado que guardan los Derechos
Económicos, Sociales y Culturales, a partir de los datos que da el gobierno y
los que presentan organizaciones civiles de nuestro país. Entre algunos de los
temas a los cuales se observa a México, se encuentran los relacionados con un
medio ambiente sano, el acceso al agua y su calidad, derechos culturales, la
libre consulta de los pueblos originarios, el derecho a la alimentación; los
relacionados con el salario digno, la situación de los defensores de derechos
humanos, sobre la política pública en materia de salud y acerca del tema de la privatización
de la educación.
A la par que México es analizado en
Ginebra, en nuestro país la ASF
indica que las gestiones de Rosario Robles Berlanga (2012-2015) y la de José
Antonio Meade Kuribreña (2015-2016) son las más opacas e irregulares, y aun
cuando la Auditoría
alertó de los puntos en los cuales estas gestiones deberían poner atención, los
entonces secretarios Robles y Meade, hicieron caso omiso.
Entretanto, las intercampañas continúan
su camino, nuestro país se disputa junto a Guatemala, en los peores índices de
desarrollo en materia de salud, brecha laboral, mortalidad infantil, y
educación, esto de acuerdo con el Informe Latinoamericano sobre Pobreza y
Desigualdad 2017, realizado por el Centro Latinoamericano por el Desarrollo
Rural. Estos datos van de la mano con el dado a conocer por el Consejo Nacional
de Evaluación de la Política
de Desarrollo Social (Coneval) el mes pasado, el cual indica que más de 50
millones de mexicanos, perciben ingresos económicos inferiores al costo de una
canasta básica, lo que coloca al 41% de la población en una situación de pobreza
laboral.
Si a los datos anteriores le
sumamos que a principios de año la Organización
Internacional del Trabajo (OIT) alertó que en 2018 el
desempleo y empleo informal crecerán en México, estamos ante un escenario nada alentador
para los mexicanos, ya que su tiempo no se ocupará en preocuparse por las
propuestas económicas o sociales de los aspirantes presidenciales o en los
mecanismos “democráticos” por el cual los partidos políticos postularon a sus
candidatos a diputados federales y senadores.
No obstante lo anterior, es
necesario revisar las propuestas de los candidatos presidenciales ahora que
formalmente inicie la campaña a finales de marzo. Un pequeño tiempo para
informarse, confrontar y buscar la congruencia entre los presidenciables puede ayudar
mucho para construir nuestras vidas los próximos seis años. Hagámoslo.
Por hoy es todo, nos leemos la
próxima. Carpe diem.
1 comentario:
Definitivamente Doctor estamos ante una complicación mayúscula. Los priístas, con ayuda de otros aliados, han incrementado la fábrica de pobres, lo que está relacionado con medidas de control para mantener el poder.
Lo que debemos hacer es ayudar a los que no tienen posibilidades de contrastar información y llevarla lo más digerible posible, tus columnas son ejemplo de ello.
Un placer leer y divulgar Iusfilosofando.
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