Samuel Hernández
Apodaca
@iusfilosofo
Apenas rebasamos las tres semanas
desde la jornada electoral y muchos de los derrotados en aquella épica
elección, no han podido superar el triunfo del tabasqueño. Columnas, memes, fake news, todo lo que pueda contribuir
a seguir la “guerrita” de desprestigio contra quien obtuvo el triunfo.
Los del PRI esperaban otro
escenario, quizá un milagro, como el de 1988 o el del 2006, ese que le diera un
empujoncito para llevar al “triunfo” a su abanderado. En el lado panista las
resistencias de aceptar su derrota se vieron manifiestas. Mientras el caso más
lastimoso es quizá el del PRD, un partido cuya dirigencia mostró su incapacidad
para generar una transición democrática.
Más allá de eso, hay que decir que
los niveles de popularidad de AMLO son muy altos, según una encuesta de
Consulta Mitofsky titulada “MÉXICO: DESPUÉS DE LAS ELECCIONES”. Realizada en
este mes, justo diez días después de la elección indican que el 62.4% siente “alegría”
con el triunfo, contra un 25.8% que siente “tristeza”. Sobre el tema de la “felicidad”,
62.7% se siente “feliz”, respecto del 23.5% que se siente “enojado”; 59.0 %
siente “confianza” en él, mientras un 27.6% muestra “desconfianza”.
El documento de 15 páginas
(consultable aquí http://cort.as/-8V9-)
aporta algunos otros elementos, verbigracia: el 57.7% dijo que la victoria de Andrés
Manuel le da "seguridad"; el 59.0% afirma tener "confianza"
y al 59.6% le inspira "tranquilidad", el triunfo del candidato de
MORENA.
También la encuesta arroja que el
61.1% considera que los cambios deberán observarse hasta con un margen de 1 año
después de que López Obrador asuma la presidencia de la República.
Así,
mientras Andrés Manuel sigue causando amplias expectativas, no solo en el nivel
nacional sino en los escenarios internacionales; se dan algunas resistencias a
los cambios, en algunos Estados los cacicazgos quieren amarrar a sus
incondicionales, mientras otros endeudan a sus habitantes, unos más simplemente
saben que es el “año de Hidalgo” y hay que llevarse lo que se pueda.
¿Y ustedes
como viven los cambios en su Estado? ¿Cómo están actuando sus gobernadores? Y
desde luego, ¿Que expectativas les genera López Obrador a unos meses de que
tome posesión? Cierto es que después de la elección, una inmensa mayoría de
ciudadanos verán de forma diferente la figura presidencial.
Por hoy es
todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.
1 comentario:
Doctor, nos presentas un texto de sumo interés, necesario después de aquél 1 de julio y rumbo a la transición que se concretará el 1 de diciembre.
Un gusto leer Iusfilosofando. La comparto en mis redes.
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