iusfilosofando

martes, 25 de julio de 2017

FÁBULA GROTESCA



Samuel Hernández Apodaca
@iusfilosofo

El proceso de búsqueda, detención y extradición de Javier Duarte, es apenas un ejemplo de lo mucho que se ha corrompido el ejercicio del poder público en México. Nombres y nombres se agregan cada día a la lista de complicidades del cordobés que ocupó la gubernatura de Veracruz para suceder a otro nefasto gobernante: Fidel Herrera Beltrán, el hombre de Nopaltepec, de 68 años y quien durante su mandato se autodenomino “Tío Fidel”.
Si bien es cierto que Veracruz no es el único Estado saqueado -durante el sexenio de Peña Nieto- cierto es que el cinismo, la violencia verbal contra ciudadanos y medios de comunicación, la inseguridad pública, el incremento de la delincuencia, no tienen punto de comparación. La desaparición y asesinato de periodistas en ese Estado encendió los focos rojos de organismos internacionales; desde Los Pinos dicho escenario no fue trascendente, porque le permitieron continuar con su política de saqueo.
La famosa fotografía que ha dado vuelta al ciberespacio y particularmente en la Twittósfera, esa en la que aparecen los gobernadores y Peña Nieto, muestran de manera clara como los hombres del Señor de Los Pinos, a muchos de los cuales el mismo Peña designó como la nueva cara del PRI, no solo son la peor versión del viejo PRI, sino que son una versión grotesca y recargada de los perores males que vive el país.
Duarte o como ahora le llama la PGR “JDDO” no es el único saqueador, le acompañan en esta fábula grotesca, Tomás Yarrington, gobernador de Tamaulipas durante el periodo 1999 a 2005; Eugenio Hernández, ex gobernador de Tamaulipas, sucesor de Yarrington; Mario Villanueva alias el chueco, ex gobernador priista de Quintana Roo; José de Jesús Reyna, gobernador interino de Michoacán; Andrés Granier, ex gobernador priista de Tabasco, detenido en 2013; Guillermo Padrés, ex gobernador panista de Sonora; Rodrigo Medina, ex gobernador priista de Nuevo León, quien estuvo unas horas en la cárcel; César Duarte, ex gobernador priista de Chihuahua, quien se encuentra prófugo; Roberto Borge, ex gobernador priista de Quintana Roo; Mario Anguiano Moreno, ex gobernador priista de Colima, acusado por irregularidades presupuestales; Jorge Herrera Caldera, ex gobernador priista de Durango. Y más recientemente el gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval y seguramente el listado se irá incrementando.
¿Que más nos espera a los mexicanos lo que resta del sexenio? ¿Cuántos gobernadores más se convertirán en prófugos de la justicia al acabar su mandato? ¿Qué nos queda a los ciudadanos para defendernos de este pillaje gubernamental?  Sin duda alguna, las leyes que hasta el momento existen tiene límites, y esos límites se asocian a  la complicidad que desde el gobierno o un parte del gobierno operan para proteger a quienes han delinquido usando su cargo.
Una de las alternativas para enfrentar estas complicidades, es sin duda la alternancia, esa forma en la que los ciudadanos optan por otra propuesta política para echar del gobierno a los ineficaces, corruptos y abusivos gobernantes. Pero la alternancia no basta y los ejemplos sobran; la organización y la participación ciudadana son imprescindibles para acompañar esta alternancia, trabajemos en ella, es por nuestro bien. Solo así podemos ir acabando con estas fábulas grotescas.
Participemos. Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.



1 comentario:

@BarbaraCabrera dijo...

Sin duda Doctor éstas y otras fábulas grotescas no deben, ni podemos permitir que se repitan, y propaguen una y otra vez.
Este país está al límite y esta urgiendo a nosotros los ciudadanos a que lo rescatemos de sátrapas políticos enquistados en el poder.
Un gran llamado el de este columna. La comparto en mis redes.