En estos días he presenciado mensajes y escuchado entrevistas, incluso
la del mesías lasallista, que se refieren a la desobediencia civil, en mi
anterior aportación di elementos para entender dicha acción. Algunos lectores
de iusfilosofando me han pedido divulgue más ideas sobre el tema con el objeto
de identificar de lo que se habla. Me permitiré hablar hoy de tres casos de
desobediencia civil en la confianza de que mis lectores dimensionen la
importancia de esta figura en la construcción de nuevas garantías civiles.
El primero que me parece mencionar es a Thoreau creador de esta acción,
nuestro personaje nació en Concord, en el estado de Massachusetts, el 12 de
julio de 1817. Su infancia y adolescencia transcurrió en su pueblo natal, en el
que habría de discurrir hasta el final de sus días de vida entera. Su nombre
original fue David Henry pero a los dieciséis años, en 1833, cuando ingresa a
Harvard- no sin haber estudiado antes latín, griego y francés- había invertido
ese orden, configurando así su primer ejercicio de desobediencia.
Dice Henestrosa que: “Thoreau
solía hacer bromas respecto a Harvard comentando que allí se podía aprender
todas las ramas del saber, pero ninguna de las raíces (…)”. (Henestrosa:
1970).
En julio de 1846 mientras el ejército norteamericano se concentraba al sur
del río grande. Thoreau se negó a pagar impuestos y por ello fue arrestado y
paso una noche en la cárcel de Concord en señal de protesta a lo que
consideraba como una guerra injusta.
En su concepción, si la no-cooperación conlleva una pena de cárcel, esta
debe ser aceptada con orgullo; considera que una persona que esté dispuesta a
desobedecer y a no evadir el castigo, antes que a cooperar con una injusticia
debería servir para que la opinión pública y el propio gobierno replanteen su
postura. Henry David sostenía que, su acción fue en protesta contra la guerra
de agresión que Estados Unidos estaba librando contra México y una denuncia de
la política esclavista del estado de Massachusetts.
Así, en su primera acción Thoreau retó y desobedeció al Estado y fijo
postura sobre la lucha atroz de EEUU – su país- contra México, el nuestro.
Otro actor importante protagonista de esta figura es Mahatma (alma
grande) Gandhi. El "Mahatama" nació el 2 de Octubre de 1869 en
Porbandar (actual estado de Gujarat) India. Tras estudiar derecho en el University College de Londres, en 1891
regresó a la India e intentó ejercer como abogado en Bombay con escaso éxito. En
1893 aceptó un contrato de un año para trabajar como abogado en Sudáfrica.
Durante el traslado de Gandhi en tren a Sudáfrica, tuvo su primer
enfrentamiento personal con la injusticia racial, porque no estaba permitido
viajar con los blancos a los de color. Le ordenaron que se marchara al vagón de
equipajes, orden siempre obedecida, pero él se negó, intentando hacer valer sus
derechos. Fue arrojado por la fuerza en plena noche, este fue su primer acto de
resistencia.
Más adelante diría que esta fue la experiencia más decisiva de su
existencia. De ahora en adelante su postura sería: ¡No¡ a cualquier tiranía y
lo razona "Si el hombre se diera cuenta de que es contrario a la
naturaleza del hombre obedecer leyes injustas ninguna tiranía haría presa en
él".(Gandhi: Mis experiencias con la verdad :1987).
A partir de esta experiencia Gandhi inicio un movimiento de
desobediencia civil que denominó Satyagraha (abrazo de la verdad), método de
acción social directa basado en los principios del coraje, la no-violencia y la
verdad. Así particularizó su lucha e inicio su movimiento por la desaparición
de castas y el otorgamiento de derechos civiles.
Finalmente me refiero a Martin Luther King, un personaje diferente, pero
comprometido, King nació el 15 de enero de 1929 en Atlanta, Georgia. Su padre
fue nombrado Michael King, por ello el hijo de este recibo inicialmente el
nombre de Michael King, Jr. Sin embargo, por un viaje a Alemania en 1934, su
padre, decidió cambiar los nombres usando Martin en honor del líder protestante
Martín Lutero.
Desde pequeño, vivió la experiencia de una sociedad segregacionista; a
los seis años, dos amigos blancos le comunicaron que no podían jugar con él. En
1948, se graduó en sociología (Bachelor of Arts) en el Morehouse y se matriculó
en el Crozer Theological Seminary en Chester, en Pensilvania, de donde salió
con un grado de Bachelor of Divinity (una licenciatura en teología) el 12 de
junio de 1951. King comenzó en septiembre de ese mismo año sus estudios de
doctorado en Teología sistemática en la Universidad de Boston, recibiendo el
grado de Doctor en Filosofía el 5 de junio de 1955.
Por aquellos días se decreto la Ley
de distribución del alumnado que autorizaba a los Estados, a distribuir a
los alumnos entre las escuelas atendiendo a su procedencia familiar,
habilidades particulares u otros criterios similares entre ellos el color de la
piel y la exclusión en algunos casos. Esto fue lo que orillo a Luther King a
integrar el movimiento por los derechos civiles y a la fundación de la Asociación Nacional por el Ascenso de las
Personas de Color, (NAACP) por sus siglas en inglés. A través de esta
organización utilizó medios legales para combatir la legislación
discriminatoria. El primer gran triunfo de Luther King y la NAACP fue que se
declarara inconstitucional la segregación en las escuelas. Dice King al
respecto de la discriminación racial:
“Ser negro en Estados Unidos significa estar confinado en los ghettos y
las reservas. Ser uno más entre la multitud de los apaleados, de los linchados,
de los atemorizados y de los vencidos // Ser negro significa en Estados Unidos
tener que luchar a brazo partido por una supervivencia física entre la agonía
psicológica más difícil. Significa ver crecer a los hijos con la nube mental de
la inferioridad oscureciendo el cielo del espíritu // Ser negro significa que
te condenen por cojo, tras haberte amputado ambas piernas.
Pero esta no fue la primera ni la última lucha
de King, sin embargo si el inicio de una revolución de conciencias, similar a
la que México necesita, una donde los ciudadanos sean civis en el más estricto sentido de la expresión. Ciudadanos que
pugnen por el cumplimiento de la constitución y sin en ellos hay que
desobedecer leyes secundarias habrá que hacerlo en función de un interés superior.
Desobedecer es una gran responsabilidad cuando
la obligación ético-moral se impone como condición para exigir el cumplimiento de
Estado de Derecho.
Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.
1 comentario:
Maestro:
¡¡Magnífico texto!!
Es importante divulgar esta columna para el debate y acción necesaria.
Me declaro una desobediente civil.
Un placer leerle.
Un fortísimo abrazo.
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