Pasados 20 años de
la firma del TLCAN, tratado cuya estructura y estrategia situaba en desventaja
a nuestro país, somos testigos de un encuentro más de los mandatarios de los
países que integran este tratado.
Este 19 de febrero
se reúnen Barack Obama, Stephen Harper y Peña Nieto en lo que se ha denominado
la CLAN, Cumbre de Líderes de América del Norte. Lo harán bajo un contexto
diferente al que vio nacer a dicha cumbre allá en 2005, la cual empezó como
la Alianza para la Seguridad y la Prosperidad de América del
Norte (ASPAN), aquel 23 de marzo de 2005 en la
Universidad de Baylor, Waco, Texas en Estados Unidos.
Las siguientes
ocasiones en las que se reunieron fue el 31 de marzo del 2006 en Cancún,
Quintana Roo; un año después, el 20 y 21 de agosto del 2007 la reunión fue
en Montebello, Quebec, Canadá; el siguiente encuentro se dio en la ciudad
de New Orleans, Luisiana, Estados Unidos, los días 21 y 22 de abril del
2008; más tarde en 2009, la sede fue Guadalajara, Jalisco, los días 8
al 11 de agosto; la sexta ocasión del encuentro se dio en la ciudad de
Washington, DC, Estados Unidos el día 2 de abril del 2012.
Este miércoles toca
nuevamente a México, pero ahora en la Entidad que vio nacer a Peña Nieto, en
Toluca, Estado de México; la reunión se da, como señalaba, en un contexto
diferente al primer encuentro que sostuvieron los mandatarios de estos tres
países allá en 2005, donde Fox y su abulia, era los protagonistas de dicha
reunión.
Los temas que
gravitan en torno a dicha reunión son: competitividad, innovación, comercio,
fronteras y seguridad; en ellos se incluyen los de comunicación y el
energético, pues en momentos –de acuerdo con Susana Chaco, investigadora del
Tec de Monterrey- México, Estados Unidos y Canadá acumulan 30% del
comercio mundial, mientras la Unión Europea, conformada por 27 países, reúne
28%, y los 13 países asiáticos, otro 28 o 29% restante, de ahí la importancia
de fortalecernos como región.
Peña, a diferencia
de Fox enfrenta la férrea oposición de un sector importante de la sociedad que
se opone a las reformas privatizadoras de los sectores estratégicos del país;
pero también Peña, a diferencia de Fox, tiene de su lado a un PRD proclive a
ceder ante el primer pestañeo peñista.
A 20 años de la
firma de TLCAN, queda una duda muy vigente de los opositores a dicho tratado en
aquellos años ¿Cuánto beneficia dicho tratado a nuestro país? La realidad
expone esas dudas; la economía nacional, el desarrollo humano de los mexicanos
no ha cambiado significativamente. Pasamos de la sustitución de importaciones a
la mano de obra barata. Transitamos de la soberanía nacional a la bandeja de
plata. Huimos de la alianza natural con el sur latinoamericano, para ser el
“patio trasero” del norte.
¿Que se discutirá
en esas tres horas que durará el encuentro? ¿Cuáles serán los temas que llevará
Peña Nieto a la mesa? ¿Qué sutiles exigencias presentara Obama? ¿Qué beneficios
logrará Harper? Con suerte lo sabremos después de 20 años. Por hoy es todo,
nos leemos la próxima. Carpe diem.
2 comentarios:
Un gran texto reflexivo el que hoy nos presenta Doctor.
México encumbrado y vituperado. Instrumentos como este es preciso analizarlos y contrastarlos con la realidad imperante. De ahí que vemos que poco se ha obtenido.
Si verdaderamente queremos que este país salga adelante, es necesario poner la frente en alto y dejar de vernos el ombligo.
Un placer leerlo e intercambiar puntos de vista.
una gran opinión, que nos recuerda lo que ocurrio cuando algunos de nosotros eramos niños, gracias doctor por su aportación y refrescarnos la memoria.
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