@iusfilosofo
Ayer la diputada de Morena Araceli Damián -Doctora en
economía de la urbanización por la Universidad de Londres, Inglaterra- informó que los
padres de los 43 jóvenes desaparecidos de la Escuela Normal
Rural de Ayotzinapa, Guerrero hablarán desde la máxima tribuna del país; tal
como ocurrió el 28 de marzo de 2001 con el Ejército Zapatista de Liberación
Nacional (EZLN), a través de la voz de la comandanta Esther.
Y mientras eso ocurre, en Veracruz el pasado 11 de enero,
cinco jóvenes fueron interceptados por elementos de la Secretaría de Seguridad
Pública (SSP) en Tierra Blanca; y aunque existen cuatro policías detenidos por
la desaparición de los jóvenes, el policía que conducía la patrulla donde
fueron intervenidos los jóvenes se encuentra prófugo y es una pieza clave en la
historia de los jóvenes desaparecidos.
Ante ese hecho, los familiares de los jóvenes desaparecidos
ya han dirigido un mensaje al señor de Los Pinos, que dice: “Hoy hace una
semana que nos los robaron. ¿Hasta cuándo señor presidente Enrique Peña Nieto
seguirá permitiendo que estemos en manos de la delincuencia? Aquí no hay
#misiónCumplida”. Usando los hashtag #desapariciónforzada #FueLaPolícia
#NOSFALTAN5
Sumado a lo anterior, una nota firmada por Sergio Rincón y
publicada en sinembargo.mx confirma lo
que muchos mexicanos ya sabíamos: los homicidios en México son una “epidemia” “y
la reducción de la esperanza de vida, evidencian una falta de acción por parte
del Estado”.
Rincón recupera la información publicada en Health Affairs
de un estudio titulado: Homicides In
Mexico Reversed Life Expectancy Gains For Men And Slowed Them For Women,
2000–10 “Los homicidios en México
han revertido la expectativa de vida para los hombres y desacelerado la de las
mujeres, 2000-10” .
El estudio expone la reducción en la esperanza de vida de los mexicanos, la
cual bajó de 72.5 años a 72, en el caso de los hombres, durante el periodo de 2005 a 2010. Para las
mujeres, el promedio de años de vida es de 77.
Otra nota formada por el mismo reportero fulmina el mundo
feliz del señor Peña, “De 2006
a 2014 se registraron más de 23 mil casos de
desaparición en toda la población, de los cuales más de 6 mil 700 fueron de
menores de edad, que representa el 30 por ciento de desapariciones en el país.”
(http://bit.ly/1T1t46q)
Los datos de uno y otro hecho son estremecedores, y
evidencian la necesidad de políticas públicas que atiendan de forma seria los
temas en referencia, pero a estas políticas debe de sumarse la exigencia de una
sociedad que no puede dejar solos e indefensos a sus conciudadanos estén en la ciudad
donde estén y sean del estrato social que sea. Debemos de alzar la voz por
nuestros desaparecidos, por nuestros muertos que son los de esta sociedad
contemporánea en la que vivimos, la mexicana.
Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.
1 comentario:
Doctor, un tema necesario nos compartes en esta Iusfilosofando.
No hay duda, la lista de temas pendientes en la agenda nacional son múltiples y el de los desaparecidos debe ser prioridad. Se ha convertido, como bien se apunta en una epidemia.
Buen y reflexivo texto, lo comparto en mis Redes.
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