La totalidad de la vida social se ha de contemplar (como un conjunto
de algunos puntos (nodos) que se vinculan por líneas para formar
redes totales de relaciones.
Carlos Lozares
Una red social es una estructura integrada por personas, con intereses comunes y/u objetivos particulares. Y esta red puede integrar a otras y así componer o constituir las redes sociales.
Para entender el comportamiento, desarrollo o integración, han surgido numerosas teorías que intentan explicarlas y algunas ciencias sociales han pasado a su estudio, a decir la sociología, la antropología, la psicología social, la economía, la geografía, las ciencias políticas.
Aunque el término red social, parezca reciente, en realidad, lleva más de un siglo utilizándose, como referente para denotar conjuntos (a veces complejos) de relaciones entre miembros de los sistemas sociales.
Como atinadamente sostiene Lozares:
“la percepción y el comportamiento de los individuos
de un grupo, así como la misma estructura del grupo,
se inscriben en un espacio social formado por dicho grupo y
su entorno, configurando así un campo de relaciones.
Estas relaciones pueden ser analizadas formalmente por
procedimientos matemáticos.” (LOZARES: 1996)
Pero más allá de la referencia que puedo hacer a las teorías, debo aclarar que no es objetivo de esta columna, profundizar sobre la teoría de las redes sociales.
La columna de hoy es más bien el espacio de reconocimiento y agradecimiento a quienes desde el 15 de mayo de 2010 se han sumado a la actividad que a mí me honra, formar parte de mi red social twittera. A lo largo de este año me he permitido sumar, encontrar y reencontrar a nuevas personas que se han constituido en amigos y muchos de ellos han cruzado la frontera virtual del simple twitte.
Me encontré con personas a las que ya conocía, con amigos que no veía, con compañeros de causas compartidas y con twitteros inteligentes, ellas y ellos; así nos constituimos en “tertulia”; participamos en la “mesatuitera”, suscribimos el “Arcadeleer” y redimensioné “iusfilosofando”.
Con 15,500 twittes, se cumplió el primer aniversario de mi perfil, IUSFILOSOFO, del ejercicio de comentar, decir, comunicar, preguntar, ironizar, criticar, responder, fulminar, alburear, convocar, reconocer, participar, agradecer… ser ente twittero!
Enumerar desde aquí mi lista interminable de agradecimientos con quienes participan en mi TL, no tendría sentido, seguramente mi desmemoria atentaría contra los momentos gratos que con más de uno he vivido y leído.
Para ellas y ellos, los que me leen: amigos, compañeros, alumnos, críticos, entre otros. Está dedicada esta columna, la de los 15,500. No debo omitir mi agradecimiento a quienes me invitaron a participar en sus espacios y que por mi disputa con Cronos no me fue posible aceptar la invitación, a quienes replican IUSFILOSOFANDO en sus espacios, a quienes comparten con sus alumnos mis opiniones, a quienes debaten desde el café mi columna, a los que me han entrevistado, para quienes me recomiendan seguirme, para quienes me recapitulan, a mis glosadores y también a mis críticos. Gracias! Por hoy es todo, nos vemos en el segundo aniversario. Carpe diem.
2 comentarios:
Maestro,
Cada entrega de Iusfilosofando, cada tweet, cada evento vivido en esta Red Social; sin duda nos enriquecen, nos proyectan y crean una fama pública que lleva a compartir nuestro pensar con diversos sectores y a generar como lo haces tú, el pensamiento crítico.
¡¡Enhorabuena por tu primer aniversario tuitero y que venga muchos más!!
Saludos desde Nornilandia, Twittosfera y Mesa Tuitera.
Recibe un fuerte abrazo.
15500 tuits en un año nos habla de un promedio de casi 43 diarios, cifra que me parece impresionante, y más aún cuando en ellos priva un pensamiento organizado y la intención de presentar comentarios informados o ligas a tus imprescindibles columnas. No te felicito por 15500 tuits o por completar un año navegando estas aguas, sino que te agradezco el valioso aporte que haces a mi particular interés por ampliar mi esfera de conocimiento. Un abrazo, Samuel.
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