Jamás se había visto un documento político y jurídico, como el
dictamen de las decisiones del Senado, tan pobre, tan oscuro, tan débil, tan
cobarde y tan mal redactado
Vicente Lombardo Toledano, en su discurso
sobre la negativa a la reelección legislativa
En las entregas anteriores (1) y (2) el ejercicio
consistió en presentar sólo el texto constitucional de la época; en la (3) el
origen del veto al tema de la reelección legislativa de Elías Calles. Presento
ahora las circunstancias tras no reelección legislativa y el intento de volver
a incluirla en el marco constitucional en 1964. Pasemos al contenido.
Desde sus inicios, el PNR con el fin de anexar e
incorporar a grupos que se encontraban fuera del partido y para ejercer así un
mayor control sobre ellos identifico a grupos y actores potencialmente
competitivos a los cuales había que tener bajo control. Dentro de esta
estrategia, la función de la no-reelección era garantizar al presidente de la
republica la posibilidad de otorgar puestos de elección popular -por una parte-
y vetar las aspiraciones camerales a los disidentes- por otra-. Pero no hay que
dejar pasar que otra de ellas fue la posibilidad tener algo que ofrecerle a los
recién incorporados “al partido”.
Dejar abierta la reelección consecutiva de legisladores,
no sólo habría permitido que los dirigentes regionales mantuvieran su fuerza
política sino que dejaba pocos espacios para ser distribuidos entre los nuevos
cuadros del PNR. Así, la no-reelección jugó una importante función, acentuar la
dependencia de los representantes regionales respecto al líder de partido; pues
este tenía el poder de mutilar el futuro de sus carreras políticas.
De esta forma
la meritocracia se consolidó como la forma más segura de ascenso político,
hacer política se convirtió desde ese momento en rendir culto al líder; por eso
el discurso de la no-reelección legislativa funciono; por ello se reforzó la
disciplina de los miembros de “el partido” y facilitó el manejo vertical y
centralizado del poder político. Lamentablemente los antecedentes de reelección
legislativa inmediata que México había tenido en el pasado y que habían
funcionado quedaron sepultados, la subordinación de ocupantes de puestos de
elección popular a la voluntad del líder, borró la carrera legislativa, y la
no-reelección consecutiva, fue su mejor instrumento.
Como podemos observar, la consecuencia inmediata de la
reforma constitucional de 1933, fue el debilitamiento del Poder Legislativo en
favor de una consolidación del Poder Ejecutivo; de un presidente todo poderoso
al que se le rendirá culto; se ele protegerá y defenderá de todo ataque.
Las
consecuencias mediatas de la reforma de 1933 fue la desprofesionalización de
los cuerpos legislativos, el debilitamiento interno, el sometimiento de los
legisladores, convirtiéndolos en instrumentos de la política y capricho del
presidente en turno.
Fue hasta
1964, cuando se planteó por primera vez la idea de volver al principio de
reelección con respecto a los diputados federales. La propuesta fue planteada
por Vicente Lombardo Toledano entonces líder del Partido Popular Socialista, en
la propuesta para reformar el artículo 59 Constitucional, se expresaba que el
objetivo de reelegir a los legisladores tenía cuatro finalidades: a) el fortalecimiento
político de la Cámara de Diputados; b) el logro de bases más
sólidas para el equilibrio de los tres poderes de la Unión ; c) el mejoramiento de
los cuadros legislativos; y d) una eficaz coordinación ante ambas Cámaras del
Congreso. (Salvador Reyes, “la reelección parlamentaria”: Quórum: 1996)
Como se explicaba en
la propuesta, la imposibilidad de reelegir a esos miembros del Legislativo
impedía la profesionalización de los integrantes. Dice Manuel Ferre que aunque
la iniciativa fue considerada "contraria a la técnica legislativa", la Cámara de Diputados votó en
favor de "que los diputados puedan ser elegidos en dos periodos sucesivos,
pero no para un tercero inmediato, sin que ello signifique que transcurrido el
tercero, puedan volver a ser electos".
La reforma
establecía:
Artículo 59. Los
senadores no podrán ser reelectos para un periodo inmediato. Los Diputados al
Congreso de la Unión
no podrán ser electos para un tercer periodo consecutivo.
Los Senadores y
Diputados suplentes podrán ser electos, con el carácter de propietarios,
siempre que no hubiesen estado en ejercicio; pero los senadores y diputados
propietarios no podrán ser electos con el carácter de suplentes. Estas normas
se aplicaran con forme a lo dispuesto en el párrafo primero de este artículo.
José Pablo Camargo reflexiona entorno a la
iniciativa y sostiene: “si se establece para un periodo solamente la reelección
de diputados, debería, en consecuencia, ampliarse dicha reelección para
senadores”. (Pedro Pablo Camargo: Reelección presidencial y reelección parlamentaria en
América y México: México: 1965)
No obstante, el
Senado rechazó la iniciativa de la colegisladora, y prefirió que el artículo 59
permaneciera invariable, por lo que el proyecto fue devuelto a la Cámara de Diputados porque
se consideró que el Senado era un obstáculo insuperable para aprobar la
iniciativa. (Salvador Reyes, op. cit.)
La respuesta del
Senado giro entorno a los argumentos siguientes:
El fortalecimiento
deseado iría en aumento con relación a la reciente reforma electoral que
permite el acceso a los Diputados plurinominales. Con relación al logro de
bases sólidas para el equilibrio de los poderes, respondían que las bases de
equilibrio de poderes en nuestro país son suficientemente sólidas y estables. Y
finalmente en cuanto al tercer punto se mencionó que el mejoramiento de los
cuadros legislativos se logra a lo largo de la militancia política y por
último, en el cuarto, esta relación depende de normas constitucionales y
reglamentarias. (Ídem)
El problema
que tuvo que enfrentar la propuesta plantada por Lombardo Toledano, fue la
disputa por los espacios de poder entre los actores políticos locales del PRI,
que formados a la vieja usanza, consideraban a la meritocracia como su forma de
ascenso político.
Lombardo
Toledano al argumentar su iniciativa exponía:
(…) la reelección de los diputados no solo es el
complemento de la integración de la
Cámara de Diputados por diferentes partidos políticos.
Estimamos que, además la reelección de los diputados va a permitir la herencia,
legislatura por legislatura, no del arte de constituir ni de formular proyectos
de ley, sino la herencia más valiosa que es la continuidad de la orientación
revolucionaria. (Vicente Lombardo Toledano: 27 de diciembre de 1964)
Sin
embargo, considero que más allá de la retórica, “la herencia, legislatura por
legislatura,” como afirma Lombardo Toledano debe ser el instrumento que permita
la profesionalización de los legisladores y que en consecuencia los beneficios
sociales se vean reflejados en las leyes que fortalezcan el bienestar social.
Hubo
intentos posteriores por tratar el tema de la reelección legislativa, después
de que el PRI perdió la hegemonía en la Cámara de Diputados en 1997, las
iniciativas presentadas se dieron en 1998, 2003, 2004, 2005, 2006 y después,
hasta 2011. Pero de esta última me referiré en otra ocasión. Por hoy es todo,
nos leemos la próxima. Carpe diem.
6 comentarios:
Maestro:
Como investigadora parlamentaria, estoy contenta con sus diferentes entregas sobre el fantasma de la reelección.
Excelentes datos para generar el análisis de estas temáticas tan apasionantes. Estaré atenta a la próxima entrega.
Un abrazo y mejor inicio de semana.
No había tenido oportunidad de leer su aportaciones, me gustaron sus entregas ahora las he leído todas, la verdad ayudan mucho a que haya mencionado como se encontraba este tema en las constituciones de nuestro país.
Gracias maestro tratare de leerlo mas constantemente
Karla
La reelección, un tema muy serio, delicado, demos pueblo cratos poder, poder del pueblo, democracia... poder... facultad o estar en condiciones de realizar tal o más cual actividad... poder, de que pude... (puedo prepararme unos huevos estrellados) he elegido, he optado por eso o por aquello porque me conviene,,, y no hay nadie que me diga que tengo que hacer... quizá conozca las consecuencias, quizá ; puede que erróneamente elija un restaurante donde me preparen unos chilaquiles descompuestos... es decir como que este tema tiene un poco que ver con las teorías penales del finalismo.... de conocer y querer el resultado,,, no estamos precisamente eligiendo un método para cometer un delito... sino se trata de elegir que tiene que realizar las conductas que están en la Constitución y en las leyes... y desde luego, obvio en beneficio del pueblo... y de acuerdo al 39 de la constitución... la pregunta es ¿el pueblo realmente ha estado eligiendo a sus gobernantes desde 1917,, con o sin reelección?...
(corrección)...sino se trata de elegir a quien tiene que realizar las conductas que están en la Constitución y en las leyes... y desde luego, obvio en beneficio del pueblo... y de acuerdo al 39 de la constitución... la pregunta es ¿el pueblo realmente ha estado eligiendo a sus gobernantes desde 1917,, con o sin reelección?...
tiene muchos aspectos este tema de la reelección,,, un cuestión de historia , política, ideología...etc.
finalmente somos todos unos perfectos animales.... (incluso más animales q los mismos animales,,, algunas especies por el mismo hombre ya ni existen)... Hobbes el hombre lobo del hombre... nos damos todos contra todos, sálvese quien pueda, o el más grande se come al chico, sino es que al revés si a caso se descuida el grande. ¿y que tiene q ver esto con las elecciones o cocretamente con el tema de la reelecció? cómo es que un ridiculo 1% puede controlar y mantener a raya a un 99%?....
se puede estar o no a favor de la reelección... jajajaja a hora si que depende de,,, pensemos, meditemos,,, ¿reelección en manos de las sabandijas que actualmente conforman las instituciones?,,,(claro salvo muy escasas y honrosas excepciones) ¿realmente el voto secreto es efectivo, con reelección o no reelección?...
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