DOS MICHOACANES

Michoacán, del náhuatl Michihuahcán (lugar de pescadores) es un gran Estado, quienes hemos tenido oportunidad de recorrer su territorio, apreciamos la calidez de su gente y lo incomparable de su paisaje. Siendo una Entidad que hace frontera con seis Estados: Colima y Jalisco al noroeste; Guanajuato y Querétaro al norte; Estado de México al este; al sureste con Guerrero; y suroeste con el Océano Pacífico; no obstante, tiene complicaciones para que sus habitantes vivan con la tranquilidad de antes.

Y es que esa parte del país tiene ya mucho tiempo siendo nota nacional. ¿Quién olvido ya la ridícula intención de Felipe Calderón (cuando habitaba Los Pinos) de suspender las elecciones para renovar gobernador y ayuntamientos, ejerciendo de facto un Estado de excepción? ¿Ya no se recuerda el “michoacanazo” que solo demostró la incapacidad de la Procuradora Marisela Morales para armar expedientes reales?

Como olvidar aquel 24 de febrero de 2013 cuando un grupo de ciudadanos cansados de la extorsión, agotados por el miedo, hartos de la inseguridad, buscaron protegerse a sí mismos de la delincuencia organizada que azotaba sus vidas, afectaba su economía, y limitaba sus posibilidades de desarrollo, organizándose en autodefensas surgidas en Buenavista, Tomatlán.

Tampoco podemos olvidar a Gregorio López Gerónimo, el padre Goyo quien pasó a la lista de los párrocos que rompen con el estatus de la simple “misión de fe”, pues al igual que Samuel Ruiz, José Raúl Vera López y Alejandro Solalinde; Gregorio López ha decido involucrase con su entorno social, no cerrar los ojos y alzar la voz. Y que nos hizo preguntarnos ¿Porque un hombre que originalmente debería dedicarse a la parte espiritual decide armarse de palos y garrotes para defender y rescatar a su pueblo?

En la agenda no debemos olvidar a Jesús Reyna García exgobernador interino y protegido y ensalzado por Fausto Vallejo, pesonaje que ahora se encuentra detenido acusado de vínculos con la delincuencia organizada. Tampoco podemos fingir que el nombramiento de Alfredo Castillo Cervantes como titular de la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, representa de facto el ejercicio de un metapoder del Ejecutivo.

¿Cómo cerrar los ojos ante la cloaca de Rosa del Carmen Verduzco Verduzco, alias  "Mamá Rosa" quien fundó el albergue “La Gran Familia”, “La Gorda” es un personaje del México del "carro completo"; es la promotora del que "no transa no avanza"; de la práctica de la ley de Herodes “o te chingas o te jodes”?. ¿Cómo ignorar que el hijo de Vallejo se asume impune y se reúne sin empacho alguno a departir con “la Tuta”? ¿Será que pronto veremos a Vallejo haciéndole compañía a su exsecretario de gobierno en alguna celda?

Lo cierto es que existen dos Michoacanes: en el Michoacán de Peña Nieto la inseguridad “no es privativo de México... es característico de una región que enfrenta retos de inseguridad y me refiero a América Latina, México tiene sus propios retos y sus propios desafíos”.

En el Michoacán  de José Mireles “vivíamos siempre junto a la muerte y la humillación, nuestros pueblos y comunidades estaban siempre enlutados, las familias desesperadas y la impotencia nos hacía apretar los dientes, bajar la cabeza y sentir la desesperanza que producen las injusticias, Niñas violadas, jóvenes mujeres, ancianos hombres fuertes; secuestrados, ultimados ejecutados, descuartizados; a pesar de que pagaban los rescates. Y frente a esto todavía teníamos que tolerar la impunidad”.

En el México de Peña Nieto los delincuentes siguen libres y gozan de cabal impunidad; en el México de Mireles quienes defienden sus derechos y alzan la voz están en prisión.

¿Ustedes cual creen que es el real? Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.