@iusfilosofo
El fin de semana mientras se instalaba en Veracruz la nueva legislatura: la LXIV ; se dio también el encuentro entre el sustituto gobernador –Flavino Ríos- y los presidentes municipales del PRD y PAN en casa Veracruz, tras el ríspido encuentro y la defensa como gato boca arriba de Flavino, la decisión fue quedarse en la residencia de gobierno.
La patética defensa del minatitleco –que el próximo mes cumplirá 66 años- va desde los baños de inocencia hasta la burla de sus interlocutores. El siniestro personaje que siempre ha navegado con bandera gris bajo las órdenes del “señor gobernador” y que sin duda ayudó a operar y encubrir el saqueo a las arcas veracruzanas, hoy se presenta con un perfil bajo.
Flavino no es ningún dulce ancianito, su experiencia como operador priísta en el Legislativo y Ejecutivo lo han llevado a ser siempre un hombre cercano al poder; es quien ha sido responsable de golpear a la oposición, esa que ahora tiene el control del Congreso local; y por su fidelidad a ciegas fue el elegido por el ahora prófugo Duarte de Ochoa para sucederlo en la gubernatura y así cubrir sus espaldas.
El notario con licencia, ya no es el prepotente viejito de hace algunos meses, hoy señala: “Tenemos juntos que buscar una solución”, pero no esconde su tufillo represor: “no es con marchas, con mítines, con plantones, con tomas de palacio como se resuelven los problemas, tenemos que hacer gestiones ante el gobierno federal para resolver este problema”. Lo que Ríos Alvarado no quiere reconocer, es que en su posición de Secretario de Gobierno estaba obligado a conocer lo que ocurría con los recursos hoy desaparecidos.
Y mientras eso ocurre con el Ejecutivo veracruzano, en el caso del Legislativo hay mucho que decir, la composición del nuevo Congreso Local a la otrora oposición a constituirse en mayoría, el PAN tendrá 16 diputados, MORENA suma –hasta el momento- 13 diputados y el PRD, 5 diputados. Pero aunque estos números pudieran parecer mágicos para un dialogo diferente en ese Estado, el fin de semana PAN y PRD excluyeron de la mesa directiva a MORENA y prefirieron negociar con el PRI.
Mucho tiene que aportar el Congreso veracruzano a la estabilidad y gobernanza de esa entidad. Que no exista una hegemonía política como en antaño, podría dar paso a mejores condiciones del quehacer político, pero hasta el momento no se ve muy provechosa esta oportunidad. Veamos que ocurre este martes en su primera sesión y a partir de ello los veracruzanos podrán saber si fijan sus esperanzas en la nueva composición política en el Congreso local o si de plano la alternancia en este poder no sirvió de nada. Así las sombras y luces en ese lado de la patria, atentos al triunfo de alguna.
Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.
1 comentario:
Doctor, muy buen manejo y opinión acerca del caso Veracruz que debe ser un partegaguas para de una vez y para siempre se destierre a políticos de poca monta y a representantes de papel que no ayuden a mejorar la situación.
Un placer leer #Iusfilosofando y compartirla en mis RS.
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