El hombre débil teme a la muerte; el desgraciado la
llama; el valentón la provoca y el hombre sensato la espera.
Franklin
Alonso
Lujambio
Acostumbrado a justificar sus errores/
A este secretario mesero/
Los sindicalistas de la educación/
Le gritaban ...ulero.
No es para menos dijo alguien/
En sus últimos proyectos el fracaso fue
su sello/
Muy machito con la SEP quiso alzarse el
cuello/
Pero olvido que doña Elba Esther no lo
eligió por bello.
Como aspirante presidencial/
Se creía muy fregón/
Pero lo último que alcanzó a ponerse/
Fue su suéter de algodón.
Ya hace en el panteón/
Con el féretro volteado/
Para no ver los errores que dejó/
este secretario fracasado.
Ernesto
Cordero
Más cordero que inteligente/
fue esta funcionario, con su jefe
diligente/
Todos los días se arrastraba y no lo
hacía mal/
Dirigiendo sus oraciones/
Al dedazo presidencial.
Dicen que una y otra vez/
candidato quiso ser/
Pero la traición vino/
De una mala mujer.
Disque las entrevistas/
Lo iban a proyectar/
Pero la botana que con el Cuauh/
lo vieron a enterrar.
Afirman que tenía el perfil/
Para suplir a Calderón/
Torpe, inculto y algo borrachón.
Humberto
Moreira
Acostumbrado a la impunidad/
Este priísta de la corrupción heredero/
Impuso a su hermano en la gubernatura/
Para tapar su cochinero.
Creyó que invitando tacos/
La prensa lo perdonaría/
Pero lo bailarín y brabucón/
Nadie lo olvidaría.
Se vio en el futuro/
Llevando al PRI a Los Pinos/
Pero a la cárcel fue a parar/
Todo por cochino.
Ahí murió en prisión y guardan su
calaverita/
Como ejemplo de mantener/
La boca cerrada y limpia la colita.
Javier
Duarte
Fue una noche de verano/
Que Fidel lo designó/
"Tú serás mi sustituto"/
Y su brazo levantó.
Ya como gobernador/
Se hizo llamar el "duque"/
corrompiendo a la oposición/
No importando que se hundiera el buque.
Reprimiendo, encarcelando a twitteros/
Ocultando lo que pasa en el estado/
Duarte mintió como pinocho/
y por ello fue sentenciado.
Aplíquenle el código penal/
que promovió el condenado/
Fue la voz que se escuchó/
Desde aquel bello estado.
Encerrado y olvidado se quedó/
ese admirador de Franco/
no por todo lo que omitió/
sino por sus gustos de naco.
Jesús
Zambrano
La muerte pregunto/
¿Quién es el presidente del PRD?/
Y nadie supo responder/
Tan intrascendente fue el chuchito/
Que nadie lo pudo reconocer.
Su cadáver quedo quemado/
Por la absurda elección/
Y ahora los chuchos están pensando/
Que no hay ponderación.
Como títere fue en vida/
nadie lo puede olvidar/
Aunque su jefe de mordida/
no lo podrán recordar.
Comamos y bebamos que mañana moriremos. Carpe diem
5 comentarios:
Maestro:
Genial su columna y notable inteligencia para compartirnos vida y obra de tan singulares personajes de esta patria.
Un abrazo!
Luis
Maestro:
Que bárbaro; sin duda alguna es usted un gran ejemplo de la creatividad y picardía que nos caracteriza a los mexicanos. Y más aún en la celebración de nuestras tradiciones.
Excelente columna.
Saludos
@DonJasso
Maestro:
Excelente manera de preservar nuestras tradiciones, a la par de la crítica necesaria al poder y a esa clase política que necesita su "estate quieto"
Muy buenas calaveronas.
Un abrazo.
CHINGONAS LAS CALAVERONAS.
MUY CREATIVAS.
DE LO MEJOR SIN DUDA.
XXXXXXXXXXX, muchos errores de dedo, faltas de ortografía y cero rima, la cual es la idea de las calaveras.
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