Hace algunas semanas escribí en mi
columna iusfilosofando "EL SISTEMA SE CIERRA" ( http://t.co/sgwYSwoL0z )
donde hable de las reformas políticas que le permitieron al sistema priísta
mantenerse en el control del poder Ejecutivo, Legislativo y desde luego
Judicial por más de siete décadas.
Referí como construyó reformas
político-electorales, que en el imaginario integrarían la pluralidad
representada en el país al ejercicio del poder, y que iban desde las
autoridades locales hasta el Ejecutivo Federal pasando por gubernaturas y el
Senado de la República.
En el periodo más reciente, del señor
Peña y su corte neoliberal, estas reformas incluyeron también la reconstrucción
de IFE a INE, la educativa, la hacendaria, de telecomunicaciones, la energética
y en materia de transparencia.
Las preguntas que en aquel momento planteaba,
no solo se mantienen vigentes sino que se actualizan. Ustedes y yo somos víctimas
de la inmensa publicidad a través de impresos, radio y televisión, además de
los portales electrónicos, de la publicidad que el gobierno federal dedica a vendernos
su concepto de país y de cómo las reformas impulsadas nos llevaran a un estatus
mejor.
Pero si todo esto ocurre y parece que
estamos mejor que antes, ¿Porque hay signos inevitables de que las cosas están
peor? ¿Porque se aplasta como en el pasado el argumento y la razón en las
cámaras legislativas? ¿Por qué se recurre a la farandulera consorte para ser
llevados a portadas de revistas y periódicos internacionales cuando se visita a
la realeza?
Las cosas no están bien, y no lo
pueden estar cuando los casos de la guardería ABC, Pasta de Conchos, Tlataya y
Ayotzinapa siguen estando como pendientes de resolver, cuando los niveles de
inseguridad se mantienen y en algunos Estados se han incrementado; cuando el
acceso a la salud, educación, vivienda y trabajo bien remunerado siguen siendo
un sueño digno de cuento de hadas.
No pueden estar bien las cosas,
cuando los poderes fácticos triunfan sobre la soberanía nacional; cuando un
poder de la unión se arrodilla frente a una televisora, cuando una integrante
de la telebancada en el Senado de la República (Arely Gómez) pasa a ser
Procuradora de la República y será -de facto- la primer fiscal del país. No
podemos estar mejor cuando Eduardo Tomás Medina Mora Icaza, personaje con
oscuros antecedentes, es nombrado ministro de la Suprema Corte y vivirá de los
impuestos otros 15 años cumpliendo así tres décadas del erario público.
En México no pueden estar mejor las
cosas, cuando es considerado el país más riesgoso del mundo para ejercer el
periodismo; cuando las líneas editoriales de los medios informativos se alinean
para proteger-como la vieja usanza- al habitante de Los Pinos; cuando los
reporteros son tratados como presuntos delincuentes por el equipo cercano a la
hoy procuradora.
Cuando se argumenta un problema de abuso
de confianza para despedir a dos reporteros
de investigación -Daniel Lizarraga e Irving Huerta- y poner en Jaque a una de
las periodistas más escuchadas del país –Carmen Aristegui- para después correrla
y cerrar así una fuente de información y comunicación alternativa. No podemos
estar bien y no lo estaremos cuando se atenta contra el valioso derecho a la
información y a la libre expresión consagrado en la Constitución.
Sin duda el régimen se cierra y la
forma de evitar que regresemos 20 años en la historia de este país es informándonos,
participando con acciones; compartir nuestra postura sobre la realidad que vive
el país y desde luego quitarle el Congreso a Peña para equilibrar el ejercicio
del poder, solo así podemos decir que nuestro país puede aspirar a estar mejor.
Mi solidaridad y apoyo con todo el equipo
de Carmen Aristegui, si permitimos que espacios informativos no alineados se
cierren, estaremos a un paso ad permitir que el régimen nos diga que hoy “ fue
un día lluvioso”.
Por hoy es todo, nos leemos la próxima. Carpe diem.
1 comentario:
Dr. muy buena la aportación que hoy nos muestra es su columna, preocupa que las cosas no estén bien y que como mexicanos a veces cerremos los ojos.
Lectorcita
Publicar un comentario